Experto desestima efectos dramáticos por derrota de Brasil

Santiago 9 Julio 14 (Notimex).- El científico social Rodrigo Gangas descartó hoy efectos sociales y políticos “dramáticos” en Brasil tras la derrota 1-7 del conjunto carioca de futbol ante la escuadra alemana en la Copa del Mundo Brasil 2014.

El investigador de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano indicó a Notimex que los grupos sociales que protagonizaron acciones de protesta tras la derrota brasileña no surgieron de la coyuntura.

“Los movimientos sociales tienen proceso de maduración, provienen de una serie de deficiencias, muchas veces de carácter estructural, que se van acumulando a lo largo del tiempo” apuntó.

“La situación es que frente a un conjunto de situaciones, afloran y estallan como expresiones de protesta, por la falta de respuestas a los problemas y las demandas“, advirtió.

Negó que la derrota de la selección brasileña vaya a provocar un surgimiento de movimientos sociales, y señaló que estaban desde antes.

“En Brasil existe un fuerte proceso de movilización social desde antes del Mundial. Incluso se puede decir desde antes de la Copa Confederaciones, el año 2013, la cual Brasil ganó, y donde desde ya se estaba criticando el fuerte gasto que se estaba realizando”, dijo.

De todas formas, el Mundial fue un “veranito de San Juan”, consideró Gangas, ante las expectativas del pueblo y el gobierno brasileños de tener una buena actuación.

Con la derrota hay un elemento de frustración, de dolor colectivo, que va a quedar en el “alma brasileña”, pero no llega a constituir un fermento social que cambie dramáticamente el escenario político social del país, estimó el cientista político.

“Hay que ser cuidadoso en creer que el fracaso de Brasil en el Mundial se vaya a traducir en un fracaso electoral del gobierno”, recalcó, aunque admitió que el gobierno muestra índices importantes de desaceleración de la economía.

Otro elemento que es necesario tener en cuenta, apuntó, es que “el proceso de movilización responde también a fallas de carácter estructural de Brasil”.

Aquí se suman fenómenos como “la situación económica que se deteriora, que se traduce en una movilización de una clase media que es más demandante y que posee mayores expectativas”, indicó.

A ello se agregan los altísimos gastos que se hicieron por el Mundial, la falta de transparencia y corrupción, gastos en estadios que no son necesarios y carencias en salud, educación, locomoción, seguridad pública, indicó.

Estos factores si podrían afectar el proceso electoral y eventualmente la reelección de la presidenta Rousseff, pero las encuestas de opinión pública “no dicen eso”.