Atlético de Madrid y Espanyol van por primer triunfo en Liga de España

29 de Agosto de 2014
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México, 29 Ago. (Notimex).- Atlético de Madrid y Espanyol de Barcelona buscarán este sábado su primera victoria en la Liga de España 2014-2015, cuando se midan a Eibar y Sevilla, de forma respectiva.

“Atleti”, que tiene entre sus filas al atacante mexicano Raúl Jiménez, se presentará en el estadio Vicente Calderón y antes del silbatazo inicial el club ofrecerá el trofeo de campeón de la pasada temporada liguera.

Los “colchoneros” empataron en la fecha uno en el Campo de Vallecas contra Rayo Vallecano y ahora le harán los honores en la capital española al reciente monarca de la segunda división y que empezó con victoria en la máxima categoría, 1-0 sobre Real Sociedad.

Se espera la presencia del Jiménez en el once inicial del timonel argentino Diego Simeone, quien cumplirá con su segundo cotejo de suspensión tras su mal comportamiento en la “vuelta” de la Supercopa de España, así que su ayudante Germán Burgos estará en el banquillo.

El examericanista disputó 62 minutos contra el cuadro rayista y dejó buenas sensaciones, tuvo algunos remates al arco y asistió en una clara oportunidad al croata Mario Mandzukic.

Atlético de Madrid intentará sacar la victoria para no alejarse más del Barcelona y Real Madrid (tres puntos cada uno), que tendrán acción el domingo, rivales con los que peleará directamente la defensa del título.

Por su parte, Espanyol, donde milita el zaguero mexicano Héctor Moreno, se estrenará en Cornella El Prat frente a Sevilla, en un duelo que luce bastante parejo y atractivo.

“Periquitos” y “palanganas” comenzaron con empates la Liga, ambos de visitante y con idéntico marcador de 1-1, por lo que la victoria ya es esperada en esta segunda jornada, los primeros para evitar el descenso y los segundos en busca de los puestos de copas europeas.

El defensor sinaloense todavía no está disponible para el técnico Sergio González y sigue con su recuperación de la rotura de tibia de la pierna izquierda que sufrió en la Copa del Mundo Brasil 2014, que le ocasionó estar alejado de las canchas entre cinco y seis meses.

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