Plaza del Templo Expiatorio mantiene viva la tradición del danzón

26 de Julio de 2014
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HISTORIA, TRADICIONES Y LEYENDAS. NOTIMEX
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León, Gto., 26 Jul 14 (Notimex).- Son las 17:00 horas y las notas de “Perfume de Gardenias” anuncian el inicio del baile en la Plaza del Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús, donde decenas de personas de la tercera edad se preparan para recibir el mejor antidepresivo natural.

El sonido instalado debajo de una carpa invita a transeúntes y automovilistas para que ingresen a la gran pista, tomen de la mano a su pareja y muestren sus mejores pasos, con el único fin de pasar un rato agradable, ya sea bailando o sentados observando la manera como se vive el danzón.

La tradición inició hace 28 años en el jardín principal del barrio de San Juan de Dios, donde cada sábado, a las 17:00 horas, se reunían los adultos mayores para convivir, y después, para amenizar la tarde, alguien trajo sonido y todos comenzaron a mover lo pies.

Cuando se creó la Plaza Pública del Expiatorio, entre las calles de Ignacio Zaragoza y Francisco I. Madero, la tradición se llevó a cabo los días miércoles, ahora son dos días dedicados al danzón en León, Guanajuato.

“No hay venta de cerveza ni de otras bebidas alcohólicas. No se paga ‘cover’ y no hay distinción de clases, el acceso es para el público en general, aunque sobresalgan las personas de la tercera edad”, explicó a Notimex Diego Martínez, guía de turistas de la localidad.

Hay quienes llegan solos o en grupo, pero siempre con el mismo objetivo: divertirse. Los hombres visten con sombrero y de traje, mientras que las damas lucen vestido, zapatillas, abanico y adornos llamativos en la cabeza.

También están los danzoneros con atuendos de pachucho, con su traje tipo zoot suit, y sus zapatos de charol estilo francés y bicolor para sacarle brillo a la pista.

No importa cómo se acuda vestido, pues lo que no se debe olvidar es cargar la mejor actitud posible, y así lo demuestran quienes para bailar dejan a un lado los bastones, las andaderas y sillas de ruedas, o aún con muletas, nada les impide vivir la música y el baile.

“Al principio se tenía contemplado que el baile durara hasta las siete de la noche pero hay ocasiones en que se prolonga. Generalmente es sonido, pero cada fin de mes o cuando hay una celebración especial, vienen los tríos, las orquestas y rondalla.

Incluso, una vez vino Margarita La Diosa de la Cumbia”, platicó Diego.

Cuando termina la música, cerca de las 21:00 horas en el lado oriente del majestuoso Templo Expiatorio, testigo mudo del baile, comienza un espectáculo de luz y sonido.

“Un show de este tipo se presentó primero en San Luis Potosí, en 2010 llegó a Guanajuato y se quedó de forma permanente para el templo.

Antes la plaza albergaba a más de cinco mil personas, ahora ya bajó la afluencia, y de viernes a domingo luce a la mitad de su capacidad”, indicó el guía local.

Sobre la fachada del Expiatorio, durante 15 o 20 minutos, se proyectan imágenes sobre la Independencia y la Revolución, así como de la construcción del propio templo, para sorpresa de quienes pasean por ese lugar.

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