Fiesta de percusiones ofrece Tambuco en Bellas Artes

21 de Octubre de 2013
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México, 21 Oct. (Notimex).- Con un variado repertorio, el ensamble de percusiones Tambuco celebró anoche 20 años de trayectoria musical con un recital en el Palacio de Bellas Artes, en esta capital.

Nominada cuatro veces a los premios Grammy, en categorías como la de Mejor Álbum de Música Clásica y Mejor Ensamble de Cámara, la agrupación integrada por Ricardo Gallardo, Miguel González, Alfredo Bringas y Raúl Tendón atrapó las miradas de un público que entre pieza y pieza la celebró con aplausos.

De manera "camaleónica", el cuarteto considerado por la crítica como uno los mejores ensambles de percusiones en la actualidad, sorprendió a chicos y grandes, al recrear diversas sonoridades con tambores africanos, afrocubanos, marimbas, trozos de madera, platillos, cajones, mesas y hasta piedras de río, instrumentos característicos de la agrupación.

En la velada se pudieron escuchar obras del uruguayo Jorge Camiragua, de los mexicanos Mario Lavista y Héctor Infanzón; del estadounidense Lou Harrison; de la japonesa Tomoko Momiyama y del rumano Gyorgy Ligeti.

El recital inició con la obra "Cuarteto en Chico", de Camiragua, una pieza con tambores, en la que los músicos parecieran recrear música de tribus africanas; minutos después, "El devenir de la noche", de Infanzón, se hizo presente.

Se trata de una obra para percusiones hecha ex profeso para dicho Cuarteto y en vez de recurrir al piano, tal como lo hiciera el propio Infanzón, sus integrantes hicieron uso de la marimba, con la juegan y se divierten en el escenario.

El programa continuó con "Concierto para flauta y percusión", de Harrison, una pieza en la que el flautista Luis Julio Toro, hizo gala de su virtuosismo, combinando a la par los tambores y claves del conjunto musical, con los que recrean una música de corte prehispánico.

"Moons of hidden times", de Momiyama, obra que fue estrenada en febrero pasado en México y posteriormente en Japón, dio continuidad al programa musical, al igual que "Sippal, dobbal, nádihegedüvel", de Ligeti, una pieza en la que la mezzosoprano Katalin Károlyi conquistó a los asistentes con su potente timbre vocal, mezclado con platillos, tambores, armónica y marimba, principalmente.

De manera pausada, la cantante juega con su voz y los propios instrumentos, al interpretar cantos muy potentes y suaves, recreando a su vez una melodía fina y virtuosa.

El recital concluyó con la pieza "Danza Isorrítmica", del mexicano Mario Lavista, obra con la que estos músicos "camaleónicos" juegan con tambores y congas, presentando una pieza de fuerte sonoridad.

Fundado en 1993, Tambuco se ha presentado en Estados Unidos, América Latina, Europa y Asia y en prácticamente todas las salas de concierto de México, al lado de grupos y artistas como Keiko Abe, Stewart Copeland, Eduardo Mata, Cuarteto Kronos, Banda de Michael Nyman, las filarmónicas de Montpellier y de la Ciudad de México y Orquesta de Catania.

A lo largo de su trayectoria han desarrollado un repertorio de música contemporánea de concierto donde se conjunta el gran colorido de la percusión del mundo y el idioma musical de los compositores de vanguardia.

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