Comparten autoras visión sobre la literatura y la violencia

México, 16 May. (Notimex).- Los poetas tienen que responder frente a los hechos violentos que suceden cotidianamente como un deber y una obligación, afirmó la autora Roxana Elvridge-Thomas al participar en la mesa redonda "Llegué al núcleo de un violento avispero", organizada por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

En el Centro de Creación Literaria "Xavier Villaurrutia", donde se realizó el evento, Elvridge-Thomas y sus colegas Lucía Rivadeneyra y María Rivera compartieron sus opiniones sobre la relación existente entre literatura, sobre todo la poesía, con la violencia.

Elvridge-Thomas señaló que su preocupación personal por esta manifestación está presente en su obra, "por ejemplo, reflejo en mis versos la violencia hacia el otro, esto incluye el odio, los celos, la venganza y todas esas pasiones humanas que nos mueven a lastimar a los demás".

"La violencia es un tono medular y es el momento de que todos los poetas tengamos que reflexionar, aunque sea un poco, con respecto a sus alcances", apuntó en su momento la poeta Lucía Rivadeneyra.

Hoy en día, reconoció, es muy difícil permanecer al margen de nuestra realidad cotidiana. La violencia no sólo está presente en las notas periodísticas sino también en los interiores de los hogares y hacia uno mismo, tal vez porque "desde el momento en que nacemos, violentamos otro cuerpo para empezar a sobrevivir", describió.

Afirmó que es un fenómeno natural, pero es a la vez una alteración del orden cotidiano. "Los artistas en general no podemos permanecer inmunes frente a la violencia, por el contrario debemos abordarla en nuestras creaciones".

Sostuvo que en la actualidad se encuentra muy presente la narcoviolencia en el mundo literario, sobre todo novelístico y periodístico; al tiempo de comentar que la pobreza está ligada a la violencia: "son historias de vida en tiempos de muerte".

Los poetas, dijo Rivadeneyra, "no debemos permanecer ajenos a este fenómeno social. Cada día vez es más frecuente encontrar poetas de varias generaciones en marchas por la paz, por eso estoy convencida de que la poesía nunca dejará de ser un bálsamo ante tanta indignación; esa violencia la estamos transformando en palabras".

María Rivera, ganadora del Premio de Poesía Aguascalientes, señaló que la violencia es un tema complicado. "En mi caso particular, es un tema que me ha interesado desde hace muchísimo tiempo, pero desde un punto de vista teórico, no poético".

"Lo más difícil de todo no es el tema violento en sí, sino cómo puede acercarse el poema a la violencia, cuál es la postura del poeta frente a esa violencia, sin llegar a sublimarla o embellecerla.
Toda violencia es obscena y no se debe hacer belleza de ella, a la violencia es poco ético embellecerla, incluso se traiciona el sentido mismo de la poesía", sentenció.

Rivera consideró que Ramón López Velarde es el mejor ejemplo para describir una posición de ética frente a lo social del poeta.

Al final de los comentarios, cada una de las poetas invitadas por el INBA leyó fragmentos de sus obras, en los cuales quedó demostrado su preocupación e indignación ante la violencia.