Descarta Colombia crisis en proceso de paz por destitución de Petro

11 de Diciembre de 2013
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Bogotá, 11 Dic (Notimex).- El gobierno de Colombia descartó hoy una crisis en los diálogos de paz, luego que las FARC calificaran de "golpe grave" para el proceso la destitución del ex guerrillero del M-19 Gustavo Petro como Alcalde de Bogotá.

El ministro del Interior, Aurelio Iragorri, aseguró a periodistas que la decisión del Procurador Alejandro Ordoñez de destituir esta semana a Petro, no tiene porqué afectar los diálogos que mantienen el gobierno y la insurgencia en La Habana.

"Debemos pensar que ese tipo de determinaciones, independiente de la posición, tenemos que acatarlas porque así lo establece el ordenamiento legal vigente", dijo Iragorri, al señalar que no cree que "sea un golpe al proceso de paz".

Ordoñez destituyó al alcalde de Bogotá por fallas en el nuevo esquema de aseo que implementó en 2012 en la capital colombiana, y que según argumentó, expuso a la ciudad a una emergencia sanitaria y ambiental y a la pérdida de sus recursos.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dijeron que la sanción a Petro, la cual incluye 15 años de inhabilidad para ejercer cargos públicos, "es otro grave golpe contra el proceso, que afecta la confianza y la credibilidad".

El grupo rebelde sostuvo que el lunes, Ordóñez "nos dio a los alzados en armas una lección sobre lo que para la oligarquía significa la democracia en Colombia y sobre las nulas garantías para ejercer un ejercicio político independiente".

La destitución del alcalde se da en momentos en que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las FARC, discuten una agenda de paz que incluye garantías a los guerrilleros que se desmovilicen, para incursionar en política.

"No creo que la decisión del procurador Ordóñez contra el alcalde, sea un golpe al proceso de paz. Por parte del gobierno no hay ningún tipo de afectación del proceso de paz", indicó el ministro del Interior colombiano.

Petro se declaró en rebeldía frente a su destitución y llamó a la movilización popular para evitar que se haga efectivo el fallo, que según dijo, es un mensaje de "guerra" contra el proceso de paz que avanza en La Habana, Cuba.

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