Apela deportación ex ministro salvadoreño condenado por crímenes

Miami, 16 Abr (Notimex).- El ex ministro de Defensa de El Salvador, José Guillermo García, apeló la decisión de su deportación emitida por un juez migratorio en Miami por crímenes de guerra cuando fue jefe de las fuerzas armadas de su país entre 1979 y 1983.

Su abogada Alina Cruz interpuso la apelación contra la deportación y el proceso para examinar el caso por parte de la Junta de Apelaciones de Inmigración en Washington podría demorar varios meses o años, según publicó El Nuevo Herald.

Un fallo del juez migratorio Michael Horn en febrero pasado y que fue hecho público por una petición legal de información de New York Times indicó que es "inconcebible" que los hechos en aquellos años pudieran llevarse a cabo sin el conocimiento del ministro de Defensa.

Durante su proceso legal migratorio en la corte migratoria de Miami en 2009, García admitió su responsabilidad por las acciones de las fuerzas armadas bajo su mando, pero señaló que no tenía el total control de soldados y negó torturar directamente a alguna persona.

Las acusaciones en su contra se derivaron de la guerra civil en El Salvador en la década de 1980.

Su proceso en Estados Unidos pudo realizarse gracias una ley conocida como Reforma de Inteligencia y Prevención del Terrorismo que el ex presidente George W. Bush firmó en 2004.

El Centro por la Justicia y Responsabilidad (CJA), con sede en Estados Unidos, impulso ese proceso contra García.

Entre los asesinatos bajo el mando de García se cuentan los de 1980 de cuatro religiosas estadunidenses a manos de soldados de la Guardia Nacional, el asesinato del arzobispo Oscar Arnulfo Romero, ese mismo año, así como en las masacres de más de mil campesinos en la zona del Mozote en 1981.

En otro caso, la Junta de Apelaciones de Inmigración evalúa una apelación contra la deportación del ex general Eugenio Vides Casanova, antiguo director de la Guardia Nacional salvadoreña, en la que también se le acusa de no hacer nada para detener violaciones de derechos humanos.

En el 2002 en un juicio civil tanto García como Vides Casanova fueron condenados por "torturas y violaciones” de derechos humanos" y se les obligó a indemnizar a las víctimas.