Frase racista de dirigente futbolístico causa polémica en Italia

Roma, 28 Jul (Notimex).- Una frase racista pronunciada por el dirigente futbolístico italiano Carlo Tavecchio, candidato a presidente de la Federación Italiana del Juego del Futbol (FIGC), desencadenó una intensa polémica en el país.

“Las cuestiones de acogida son una cosa, las cuestiones del deporte son otra. Inglaterra identifica sujetos que entran si tienen profesionalidad para hacerlos jugar, nosotros en cambio decimos que Opti Pobá vino acá, que primero comía bananas, ahora juega titular en la Lazio”, fueron las palabras del dirigente.

Las pronunció ante la asamblea de la asociación de balompié amateur, que él mismo dirige. Pretendía promover el uso de jugadores italianos en los equipos y se le ocurrió, para ello, hacer referencia al tal Optí Pobá.

Pero resulta que tal deportista no existe. Fue un ejemplo desafortunado, especialmente por sugerir que los jugadores africanos que llegan a Italia “antes comían bananas”, la misma imagen que suelen usar los racistas para relacionar a las personas de raza negra con los monos.

Este episodio podría afectar seriamente el camino de Tavecchio hacia la presidencia de la FIGC, ya que era el principal candidato a suceder a Giancarlo Abete, quien renunció tras el fiasco de la selección nacional en la Copa del Mundo de Brasil 2014.

La reacción a las declaraciones del dirigente inundaron las redes sociales. Incluso en Facebook se creó la imagen de una casaca con los colores de la Lazio (celeste) y con el número 10 en la espalda, bajo el nombre “Optí Pobá”.

Para el presidente del Consejo de Ministros, Matteo Renzi, esas palabras fueron un “clamoroso autogol”, mientras el subsecretario a la presidencia del Consejo de Ministros, Graziano Delrio, se dijo “sumamente irritado” por el comentario.

En el Vaticano también reaccionaron. “¿Cuáles valores educativos puede transmitir el mundo del futbol si su máximo dirigente está listo a pisotear la dignidad humana de los atletas”, señaló Edio Costantini, presidente de la Fundación Juan Pablo II para el deporte.

“La declaración arrogante y desubicada de Tavecchio demuestra la degradación cultural y de proyecto de un sistema de futbol anticuado, autorreferencial, enrocado sobre sí mismo e incapaz de modernizarse. El declive del sistema del futbol es el declive cultural y de valores de una entera clase dirigente”, apuntó.

Por lo pronto la Federación Internacional del Futbol Asociado (FIFA) envió una carta a la FIGC pidiendo que se investiguen los “presuntos comentarios racistas de parte de uno de los candidatos a la presidencia de la federación italiana”.

En la carta, el máximo organismo del balompié mundial advirtió que, por el episodio, se activó el equipo especial contra el racismo y la discriminación, cuyo trabajo reviste una “prioridad absoluta”.

Aunque desde diversos sectores se exigió la renuncia de Tavecchio a la presidencia, él mismo aclaró que seguirá adelante con su candidatura.