Organismo civil destaca armamento de los delincuentes venezolanos

30 de Septiembre de 2014
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Caracas, 30 Sep (Notimex).- En Venezuela los delincuentes están mejor armados que los cuerpos policiales, lo que mantiene la tendencia alcista de homicidios que este año llegará a los 24 mil, según el Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV).

“La politización radical de la sociedad y de las instituciones ha cercado a los cuerpos de seguridad para que hagan su trabajo, puesto que los delincuentes ahora están mejor armados que ellos”, precisó Roberto Briceño León, sociólogo y vocero de esa asociación civil.

Briceño dijo, en diálogo con Notimex, que la ley para el desarme y control de armas y municiones tuvo como resultado desarticular “al ciudadano honesto, a los policías y jubilados, quienes ahora están a merced de los delincuentes”.

Para él queda como interrogante si los legisladores alguna vez creyeron que el “delincuente y asesino realmente iba a entregar su arma de forma voluntaria por una Ley, o que podía estar dispuesto a cambiarla por una computadora”.

Agregó que “esta ley, aprobada en junio de 2013, no ha cumplido su cometido, a pesar de contar con un Fondo para el Desarme al cual se le asignaron 300 millones de bolívares” para la prima de los incentivos, según informó el ministro del Interior, Miguel Rodríguez.

“Los delincuentes ni entregan las armas, ni se las quitan y eso queda demostrado con los asesinatos que a diario se cometen en el país y en donde el instrumento usado son las armas de fuego (pistolas, escopetas y fusiles AK 47, por parte de algunas bandas)”, afirmó.

“La policía, que sería la encargada de desarmar a los delincuentes, es vulnerable frente a ellos porque su armamento es obsoleto; un policía porta una XP4, para fajarse con un antisocial que tiene y utiliza subametralladoras, fusiles y hasta granadas”, resaltó.

Briceño añadió que la politización radical de las instituciones afecta el trabajo de los funcionarios que se sienten amenazados y no actúan, ya que “si proceden en contra un individuo o un colectivo” (grupo político armado) puede ser echado por sus superiores.

“Su situación es compleja porque se encuentra en los extremos, por un lado el ejercicio de sus funciones es coartado; por el otro, se ven tentados a corromperse para mejorar sus sueldos y además corren el riesgo de ser víctimas por no “tener un armamento adecuado”.

Añadió que el Plan Patria Segura, que dividió a la ciudad en mil 576 cuadrantes, para dar respuesta policial a los llamados de emergencia es un plan ineficiente porque nadie responde las llamadas telefónicas.