Confirma BCE programa de compra de deuda y medidas contra deflación

02 de Octubre de 2014
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Roma, 2 Oct (Notimex).- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, confirmó hoy los detalles del programa de compra de deuda y anunció que el Instituto está “listo” para tomar medidas “no convencionales” que permitan contrarrestar la baja inflación.

En rueda de prensa tras celebrar en la ciudad italiana de Nápoles la reunión de octubre del consejo de gobierno del BCE, Draghi dijo que el instituto mantendrá durante dos años su programa de compra de deuda para dar impulso al crédito y estimular la recuperación.

Explicó que a mitad de mes comenzará el plan de compra de bonos garantizados y en el último trimestre del año la de los denominados Abs (respaldados por deuda privada).

Draghi también confirmó la compra de activos de bancos calificados como “bonos basura” (con rating menor a –BBB), de países como Grecia y Chipre con el objetivo de impulsar la financiación y beneficiar, sobre todo, a las pequeñas y medianas empresas.

Asimismo, el presidente del BCE reconoció que las previsiones de crecimiento en la zona del euro son “modestas”, con un debilitamiento de la recuperación.

Señaló que el consejo de gobierno del BCE acordó de manera “unánime” el uso de “métodos no convencionales” en el caso de que fuera necesario para combatir la baja inflación durante un periodo de tiempo prolongado.

Por otra parte, el BCE mantuvo este jueves las tasas de interés de la zona del euro al mínimo histórico del 0.05 por ciento con el objetivo de impulsar el crecimiento económico.

Informó que el consejo de gobierno reunido en Nápóles también decidió dejar sin cambios el tipo de interés de la facilidad marginal de crédito en el 0.30 por ciento.

La reunión del consejo de gobierno del BCE se dio en un contexto de protestas de miles de personas contra la austeridad, el desempleo, la precariedad laboral y la Unión Europea.

Decenas de agentes que fueron desplegados en el centro de Nápoles usaron gases lacrimógenos y chorros de aguar para repeler a unos cuatro mil manifestantes que intentaban llegar a la Reggia di Capodimonte, el castillo donde se reunió el consejo de gobierno del BCE.

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