Niñas nicaragüenses temen por violencia en casa y escuelas: estudio

21 de Octubre de 2014
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Managua, 21 Oct (Notimex).- La violencia contra las niñas está arraigada “de forma alarmante” y se percibe como “normal” por las víctimas, reveló un estudio entre más de siete mil jóvenes en 11 países divulgado por un organismo no gubernamental en Nicaragua.

Las niñas encuestadas de 12 a 16 años revelaron que “jamás” o “rara vez” se sienten a salvo de la violencia en sus hogares, las comunidades y la escuela, de acuerdo con el estudio de la organización Plan Internacional.

Las adolescentes sufren violencia en forma de acoso sexual, violación, explotación y abuso sexual o económico, matrimonio forzado a través del chantaje y el silenciamiento de las menores mediante la intimidación, refirió el estudio “Escuchen nuestras Voces”.

Por ejemplo, el 80 por ciento de las niñas en una zona de Ecuador y el 77 por ciento en otra de Bangladesh afirmaron que “jamás” o “rara vez” se sienten seguras en su comunidad.

En Centroamérica y Sudamérica, el 44 por ciento aseguró que al menos había completado nueve años de escolaridad, mientras una de cada tres niñas afirmó que “jamás” deciden si quedarán embarazadas y tampoco se expresaban delante de niños.

En Nicaragua, la muestra se celebró entre 737 adolescentes de comunidades de Chontales (centro) y Villa El Carmen (municipio de Managua).

El 65 por ciento admitió la inseguridad al usar los baños de las escuelas por temor a ser espiadas, abusadas o maltratadas física y psicológicamente.

El 42 por ciento de las niñas y el 50 por ciento de los niños en Nicaragua expresaron que “jamás” o “rara vez” están seguros como los adolescentes cuando caminan a la escuela.

El nivel de seguridad en el trayecto a la escuela “puede provocar que pierdan clases o incluso abandonen” el curso, añadió.

Un común denominador en todas las regiones es carga doméstica que recae sobre los hombros de las menores.

El 47 por ciento en Asia y el 35 por ciento en Centro y Sudamérica manifestaron que “jamás” comparten las tareas en casa de forma igualitaria con sus hermanos.

El estudio refirió que el trabajo doméstico muchas veces interrumpe las horas de estudio de las menores incluido el cuidado de hermanos pequeños.