Colombia rechaza que vaya a pactarse paz armada con las FARC

22 de Octubre de 2014
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Bogotá, 22 Oct (Notimex).- La delegación del gobierno colombiano en los diálogos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) rechazó hoy que vaya a pactarse una paz armada, como lo dicen los opositores al proceso.

Al responder a las críticas del derechista Centro Democrático, que encabeza el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), el jefe del equipo negociador, Humberto de La Calle, las calificó como “especulaciones”.

“Parte esencial del acuerdo al que se llegue es la dejación de armas. No hay allí equívoco de ninguna naturaleza. No habrá paz armada”, dijo en Bogotá el delegado oficial en los diálogos que se desarrollan en La Habana, Cuba.

En el punto sobre la creación de circunscripciones temporales en el Congreso, tal como se menciona en el acuerdo sobre participación en política, De la Calle aclaró que no se le entregarán curules a las FARC.

Según el negociador, la creación de circunscripciones especiales “no es un regalo para las FARC”, como afirma el Centro Democrático, sino una manera de “ampliar los desarrollos democráticos que están vigentes”.

“Las circunscripciones transitorias de paz no son para darle cupos a las FARC. Son para las comunidades. Si las FARC desarmadas a través de un partido desean participar en política, se les brindarán las garantías necesarias”, explicó.

Pero también ellas “deben asegurar esas garantías a la sociedad. Quién participa en concreto es algo que debe resolverse dentro del marco de la justicia transicional”, agregó.

Reiteró que es falso que el Acuerdo haya modificado las normas sobre expropiación, y afirmó que las leyes que regulan estas materias están vigentes desde hace años, desde el siglo pasado. “No le hemos cambiado una coma”.

De la Calle aseguró que “hay dudas legítimas y críticas que siempre son bienvenidas, pero también tenemos que decir con toda franqueza que hay afirmaciones absolutamente equivocadas que no corresponden a la verdad de lo pactado”.

El gobierno del presidente Juan Manuel Santos sostiene diálogos con las FARC en la isla para acabar medio siglo de conflicto interno, proceso que tiene a Cuba y Noruega como garantes y a Venezuela y Chile como acompañantes.

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