Aunque oficialmente no se han proporcionado resultados sobre los resultados de la investigación que inició la visitaduría general, trascendió que algunos internos se quejan de hacinamiento, ello a pesar de que las autoridades estatales había realizado trabajos para ampliar las instalaciones el Cereso.
Otra de las inconformidades, a decir de los familiares de los internos, es que en los últimos meses han estado haciéndose intercambios de reos, algunos originarios de San Juan del Río están siendo enviados al reclusorio de San José el Alto y algunos de la capital son remitidos a San Juan del Río.
“Como familiares es complicado poder visitar a nuestros internos cuando se los llevan a San José el Alto, realmente no nos dan muchos argumentos, cuando llegamos a hacer la visita nos dicen que fueron trasladados. Para nosotros representa gastos adicionales porque viajar a Querétaro nos implica hasta 150 pesos, solamente en el traslado, a ello hay que sumarle que perdemos todo el día y dejamos de hacer algunas actividades económicas”, señaló Margarita Gutiérrez.
Cabe recordar que hace cinco meses se realizó un operativo en el penal de San Juan del Río, en donde participaron 237 elementos, de diferentes instancias de seguridad. A decir de las autoridades de la Secretaría de Gobierno estatal, no se encontraron irregularidades graves en el centro de reclusión.
El Cereso de San Juan del Río alberga a poco más de 670 internos y gobierno el estado trabaja en la construcción de módulos para ampliar la capacidad para 240 personas más. Los reclusos tienen una estadía promedio que varía entre los cuatro y los cinco años, por lo que es una población fluctuante.