Preocupa a Iglesia seguridad en zona oriente de Puebla

Puebla, 10 Nov. (Notimex).- El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, exhortó a las autoridades en materia de seguridad a que atiendan la problemática que tienen las comunidades en el zona oriente de la entidad poblana, como Guadalupe Victoria.

Tras los hechos acontecidos en Guadalupe Victoria, en donde sus habitantes quemaron un edificio del ayuntamiento, así como una clínica, entre otros bienes inmuebles, en entrevista dijo que "esa zona está un poco difícil y con más violencia, en donde las parroquias están preocupadas".

Víctor Sánchez destacó que mantiene constante comunicación con el párroco y los sacerdotes, pues "el ambiente es difícil desde días anteriores, en Chilchotla, Quimixtlán y Chichiquila, así como Guadalupe Victoria".

Sánchez Espinosa reiteró que en días pasados estuvo con fieles de esa comunidad y convivió con ellos, quienes poco a poco se fueron dispersando para regresar a sus comunidades, después de ello, sucedió ese acto de violencia.

El arzobispo refirió que ese día estaba en dicho municipio y se reunió con 15 comunidades de la cabecera municipal, con motivo de la clausura del Santo Jubileo, y salió de la población 15 minutos antes de que sucediera un homicidio.

Resaltó que la zona requiere de mayor atención por parte de las autoridades, "en este momento se encuentra difícil, además de que hay preocupación por parte de los párrocos".

El pasado lunes 4 de noviembre, a las 22:00 horas, autoridades acudieron a la Calle 7 Norte y Avenida Independencia de dicho municipio, para realizar el levantamiento de cadáver de Ernesto Osorio Cervantes, de 30 años, quien era dueño de una dulcería del lugar.

El cuerpo fue encontrado sin vida en el interior de una camioneta marca Nissan, tipo Pick up Frontier, con traumatismo craneoencefálico producido por proyectil de arma de fuego.

Por lo anterior, un grupo de pobladores se manifestó en el exterior de la presidencia municipal y posteriormente causó daños, quemando dichas instalaciones y dos cajeros automáticos que se encontraban en el interior del inmueble, así como cuatro patrullas de la Policía Municipal.

Además se trasladaron a la casa del edil y a una clínica de su propiedad, mismas que fueron saqueadas y quemadas.