En Puebla, el ajolote se encuentra en peligro de extinción

23 de Abril de 2014
Guardar
Puebla, 23 Abr. (Notimex).- El ajolote es parte fundamental de la cultura e historia de México; sin embargo, se encuentra en peligro de extinción debido a la destrucción de hábitat y la introducción de especies no nativas, afirmó María Guadalupe Gutiérrez Mayén, profesora-investigadora de la Escuela de Biología de la BUAP.

De acuerdo con el Diccionario Etimológico, la palabra ajolote proviene del náhuatl y significa monstruo de agua. Se refiere a un animal anfibio que tiene cuerpo de pescado y patas de rana.

En entrevista telefónica con Notimex, Gutiérrez Mayén destacó que estos organismos estaban bien distribuidos dentro del estado, con una especie y debido a la situación de la destrucción del hábitat, es una problemática que enfrenta la Sierra Norte de la entidad.

Indicó que en el caso de los ajolotes, hay una especie que es Ambystoma velasci, que se encuentra ampliamente distribuida en la parte de Chignahuapan, en la Sierra Norte y lagunas.

Además, la especie Ambystoma taylori es endémica de Puebla y solamente está en los lagos cráter, como en Alchichica y en la laguna de las minas, se encuentra en esa zona y está seriamente amenazada.

“Se ha llevado a cabo la introducción de trucha y otras especies a las lagunas en donde la gente las saca y las vende al turismo, pero introducir especies de peces no nativas consumen los huevos y larvas de los ajolotes y eso se refleja en una disminución de la población en la Sierra Norte”, dijo.

María Guadalupe Gutiérrez manifestó que la especie es explotada por los lugareños con la creencia de que son medicinales y elaboran jarabe de ajolote; asimismo, los venden en la capital poblana, lo cual lleva a que estos organismos tiendan a desaparecer.

La investigadora integrante del Laboratorio de Herpetología de la Escuela de Biología de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) enfatizó que ante esto han hecho trabajos de investigación en algunos sitios de la Sierra Norte y para llevar a cabo la técnica para poder reproducir estos organismos.

“Se ha logrado la reproducción en cautiverio, ya se sabe cómo hacer esto, pensando en establecer en un futuro algunos criaderos e incluso después de hacer evaluaciones en campo, reintroducir la especie a su hábitat natural”, expuso.

Indicó que desde 2008 iniciaron los trabajos para su reproducción en cautiverio, pero mientras no se solucione la problemática de terminar con la trucha y especies de peces que no son nativas no es factible reintroducir dichos organismos, pero nosotros tenemos esa técnica de reproducción en cautiverio”.

Resaltó que el ajolote es una especie que cumple una función en la naturaleza y tiene un papel, al ser parte de una cadena atrófica, es un eslabón, por lo que si desaparece generaría un desequilibrio en el resto de los componentes de un ecosistema y de dicha cadena atrófica.

“En México hay unas 18 especies de ajolote, culturalmente son importantes dentro de la cultura prehispánica, para los mexicas, el ajolote tiene un papel fundamental en su cosmovisión, en una serie de aspectos era una pieza fundamental”, enfatizó.

La especialista de la BUAP detalló que para la ciencia el ajolote es fundamental, al contar con ciertas características importantes y particulares que lo hacen una especie buena como modelo para llevar a cabo trabajos científicos como es el caso de embriología.

“Muchos de los adelantos que se han llevado a cabo en el área de embriología ha sido utilizando estos organismos como modelo debido a que tiene una serie de características que los hace únicos”, expuso.

Para evitar su extinción, a través de la posible reintroducción del ajolote, a los académicos corresponde llevar a cabo trabajo de investigación de los sitios naturales, saber en qué estado están los bosques y lagos donde habita y se reproduce; asimismo, ver la densidad de cuántos ajolotes quedan en los lagos y en qué condiciones.

“Se tienen que sacar a los peces no nativos, ya que ningún programa de conservación o rescate va a funcionar, deben trabajar con la gente con educación ambiental y la Semarnat, así como implementar programas para sacar los peces y en un futuro se pueda recuperar las poblaciones que quedan y reintroducir organismos donde habitaban”, expresó.

Archivado en