“Cuestión de tiempo” aparición del ébola en Estados Unidos: experto

01 de Octubre de 2014
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Ginebra, 1 Oct (Notimex).- El experto estadunidense en enfermedades infecciosas y salud pública Jesse Goodman consideró que la aparición del primer caso de ébola en Estados Unidos era tan sólo cuestión de tiempo.

"Con una gran epidemia que está fuera de control y la alta frecuencia de viajes desde y hacia África Occidental, la aparición del primer caso de ébola en Estados Unidos era cuestión de tiempo”, afirmó Goodman profesor de medicina del Centro Médico de Georgetown en declaraciones a Notimex.

"Si bien nadie debe entrar en pánico”, el experto reconoció que puede haber varios motivos de preocupación en diversos frentes.

Señaló que el contagio con el virus letal puede llegar a ser trágico tanto para el paciente y su familia y, además, constituye una fuente de tensión para las personas con las que tuvo contacto, los trabajadores de salud y la comunidad en general.

En segundo lugar, consideró que varias personas estuvieron expuestas al portador del virus antes de que fuera puesto en aislamiento por lo que, "es muy posible que uno o más de sus contactos estarán infectados”.

Por esta razón, subrayó la importancia de la identificación rápida y completa, además de una observación minuciosa de todos los contactos, así como la colaboración de la comunidad para que sean conscientes de la eventual aparición de posibles casos, cuestión fundamental para evitar nuevas rondas de infección.

"Si alguien no estaba de acuerdo antes, ahora debe entender que es una emergencia absoluta que la epidemia en África Occidental esté bajo control”, indicó.

Consideró que se requerirá un esfuerzo masivo para contener el virus y sumado a ello "el compromiso mundial está demorando mucho”.

Instó a que todos los países se unan en una respuesta vigorosa en favor de la zona afectada en África y encomió la respuesta solidaria del presidente Barack Obama hacia los países afectados, en particular Liberia.

Esa respuesta debe ser acelerada, bajo una firme dirección de mando, control, coordinación y colaboración, argumentó.

Agregó que "mientras que existe la expectativa de que el presente caso detectado en Dallas, y que probablemente los futuros casos, puedan ser contenidos, es importante no ser demasiado confiado”.

Indicó que “continuamente, ahora y en el futuro, (se debe) reexaminar la forma en que el virus se está comportando, las medidas de salud pública y la respuesta médica para evaluar lo que potencialmente puede ser mejorado”.

A pesar de que la respuesta en el caso del enfermo de Dallas ha sido ejemplar, Goodman consideró que en realidad no se sabe por qué la enfermedad no fue reconocida cuando el paciente buscó atención médica en un principio.

Además no se sabe si se le cuestionó sobre su historial de viajes, "una de las herramientas de diagnóstico más básicas, pero importantes”.

"Si se siguieron todas las indicaciones y protocolos para las pruebas, y a este paciente no se le aplicaron todas las pruebas, aclaró, los protocolos deben ser reevaluados”.

Es crítico asegurarse de que los hospitales y trabajadores de salud de todo el mundo estén alerta, obtener historias de viajes, y, si existe alguna duda remota de que el paciente en turno podría estar infectado con el virus del Ébola, se deben poner de inmediato en contacto con las autoridades sanitarias, por ejemplo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos.

Y mientras se confirma o descarta la enfermedad se debe aislar al paciente que proviene de una zona infectada, sostuvo.

Observó que incluso en los países en los que se desarrolla la epidemia en África los trabajadores de salud a pesar de que siguieron todos los protocolos y llevaron al pie de la letra todas las medidas de seguridad, todavía no se alcanzan a explicar por qué se infectaron.

"Aunque es poco probable, es posible que no comprendamos plenamente todas las posibilidades de transmisión de esta cepa del virus, o que el virus podría cambiar. Es por ello que vigilancia extrema en las prácticas, y una mente abierta son críticos”, enfatizó.

Por último, Goodman consideró que se debería replantear la cuestión de los viajes no esenciales a las zonas afectadas por el ébola, es decir a Sierra Leona, Guinea y Liberia, pues a su parecer si menos personas viajaran a los países en los que la epidemia todavía no ha podido contenerse, los riesgos podrían ser reducidos.

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